Esta ama de llaves se merecía que la trataran así, ya que se pasea por allí retorciendo el culo y echando los cojones también. Así que la pinchó en la boca con fuerza. Al parecer su coño estaba tan en llamas que la rubia perdió el miedo. Incluso su amiga ayudó a sujetar a esta matona para que el amo pudiera correrse en toda su garganta.
Qué comienzo más interesante. Y la hermana está muy bien con ese sujetador. El hermano y la hermana resultaron ser avanzados. La broma de los cigarrillos me ha hecho mucha gracia.