Mientras observaba el juego lésbico de estas dos bellezas tetonas, me preguntaba todo el tiempo. A cuál de ellas elegiría si sólo me pidieran que eligiera una. Mi elección pasó de la pelirroja a la morena y viceversa. Al final, decidí que probablemente elegiría a la pelirroja. ¿Y tú?
Haría cualquier cosa para no ir a la cárcel. Pero si esa es la paga que quería el guardia, el agresor tiene que hacer lo que pueda. Y así, este tipo se la folló bien, se la folló en todas las posiciones, de manera que la propia guardia ha querido probar su polla. Y el final en su vientre completó el pago. Todas las deudas habían sido pagadas. Aquí llega la tan esperada libertad.
Así es como llamo a las tetas.